Gema #9: Cianita

Se trataba de los primeros días en La Formación. Entonces empiezo a leer este libro escrito por una ex NASA-girl que describía detallada y certeramente el cómo este mundo no es más que una manifestación material de Otro Mundo  invisible y puramente energético que vibra y oscila muchísimo antes que éste que percibimos en "carne y hueso". Así, entre párrafos hablando de campos morfogenéticos y espirales de luz, empecé a recordar. 

Eran aquellos sábados por la mañana en que yacía plácidamente en mi cama, allá por la añorada década de los 90's cuando tenía aprox. 10 u 11 años (Ver post Sábados) en los que vislumbraba esas partículas de polvo, escamas y ácaros flotar tan pacífica y hermosamente al trasluz de los rayos de sol de la incipiente mañana que ingresaba por la ventana. Miraba aquellas pequeñas partículas y podía sentir entonces que todo mi cuerpo estaba en movimiento, que de pronto podría desvanecer,e y no solo viajar, sino que también fundirme con todo lo demás, comprender muchas cosas y sentirme completa, más grande. De pronto levantarme para hacer la tarea de matemática que tenía para el lunes, me parecía una minucia; ser la más popular del salón era algo tan carente de sentido. Todo tomaba una forma diferente porque mi perspectiva podría ser diferente. 

Luego vino el desayuno y lo olvidé. Vino la secundaria y lo olvidé. La universidad, los novios, las salidas, los estudios, las graduaciones y lo olvidé. 

Muchos años después me encuentro con un libro y una cultura que hablan de estas "ensoñaciones" matutinas como algo que puede ser (oh) explicado, comprobado y sustentado. De pronto ver escrito en papel y hacer lectura copiosa de una serie de datos que desarrollaban aquellas sensaciones que me sucedían aquellos sábados pasados; fue para mi una gran llamada, como si de pronto sonara el despertador de mi conciencia. No es el fin de este post hablar del aspecto teórico y formal de lo que es la sanación energética ni explicar ampliamente la anatomía de los chakras; sino netamente relatar mi sentir al respecto. Ya habrá oportunidad de ponernos teóricos en otra oportunidad (además que hay cientos y miles de autores con gran trayectoria a los cuales consultar al respecto).

Recuerdo que cuando nos reuníamos en la clase para dar nuestras opiniones respecto a lo leido, comenté una de aquellas teorías que tenía cuando niña y que gracias a Barbara Brennan podía sentir que quizás después de todo, no estaba del todo desquiciada. Yo postulaba que todos nuestros recuerdos, vivencias, emociones y pensamientos quedaban colgados en algún lugar invisible que todo lo contenía; a manera de fibras que tejían una especie de red que de alguna misteriosa forma podría ser tocada por nosotros. No tenía la más mínima idea de cómo pudiera lograrse esto, sin embargo algo en mí me decía que era totalmente cierto y posible.

La Cianita eleva los planos del pensamiento y el conocimiento, incitando al subconciente a dedicarse a lo esencial, sin dejarse llevar por lo transitorio. Estimula dones psíquicos y la intuición, tiene la capacidad de sintonizar con el nivel causal, ayudando a manifestar la energía espiritual como pensamiento; conecta con los guías espirituales. Aporta integridad y maduración espiritual, ayuda a separarse de la idea del destino ciego.

Muchas veces vivimos el día a día sin mayor gracia o apreciación. Constantemente se nos dan señales, unas más obvias que otras pero todo el tiempo recibimos pequeñas manifestaciones de Gloria en mil y un formas. Quizás la mas común de ellas son las "coincidencias" o "casualidades"; pero qué gran cambio y sentido se obtienen cuando en vez de llamarlas así, les tratamos como "guía" y abrimos las manos para recibir el gran mensaje o regalo que tiene para nosotros. 

Luego de un tiempo empezaron los sueños y los rostros conteniendo mensajes que semanas después encontraría en libros teóricos de metafísica o sanación. Era un sentimiento como el del cuento de Hansel y Grettel, solo que en mi caso no habían pájaros que se comieran las migas guía. Seguía estas pequeñas pistas, de pronto sentía que había una cuerda que estaba, en un extremo, a mi y al otro extremo había alguien que me amaba de una forma celestial, fuera de este mundo. No podía verlo, sólo sentirlo y en esta oportunidad había empezado a dar jalones de esta cuerda, llamándome, insistiendo para que busque el otro extremo y me encuentre finalmente con él. Y yo simplemente empecé a andar en esa dirección.

Realidades Prácticas

• Procura anotar los sueños que recuerdes, por más locos o inverosímiles que parezcan. 
• Atesora cualquier momento de inspiración; ya sea viendo un sunset, paseando con tus seres queridos o cocinando.
• Cuando tengas algún pensamiento "disparatado", no lo juzgues ni anules. Averigua al respecto, investiga, puedes encontrar algo muy valioso o interesante para ti. 
• Ten presente que no existes solamente para algún día dejar de existir.

Cianita